martes, 12 de agosto de 2014

Qué bonita vecindad... sin Quico.

Esta icónica canción del Chavo del 8, tuvo también como era costumbre de Chespirito, su versión, esta vez sin Quico, pero con una notable coreografía, aunque un poco lenta, con tomas que descubren un techo que igual no se sabe si hubo o no el mismo.


Lo que más destaco es el solo de trompeta al final que en la versión original no se apreciaba por los diálogos de sus personajes.

¿Qué les parece?

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